Like a mess II

Al final me quedé sola, con una navaja en la mano a mitad de la noche, llorando y ,en pocas palabras, destruida,mi vida dejó de tener sentido, (aunque para empezar siempre viví con ese pensamiento) ahí fue cuando los cortes comenzaron a intensificarse y mi vida estaba en peligro, nadie sabía hasta donde era capaz de llegar, yo les aseguro que era capaz de llegar a muchísimo.
Terminé yendo a terapia psicológica, un día terminó cambiando mi vida, mi familia y yo decidimos ir a la feria, algo común en un lagunero, estando en el show de delfines (me encantan los delfines) un intenso ataque de ansiedad llegó, no pude estar sentada alrededor de muchísimas personas y terminé saliéndome de ahí, mi mamá y mi hermana decidieron llevarme a casa, pero ahí no terminó, buscaba sin parar el cutter que había tirado unos días antes, necesitaba algo que liberara mi sentir, sin conseguirlo me volví literalmente loca y terminé en la cruz roja, con un calmante caminando por mi cuerpo, y ahí me di cuenta hasta donde había llegado.